La orientación sexual u orientación del deseo, hace referencia a nuestras preferencias eróticas, si nos atraen los hombres o las mujeres. Si nuestra atracción se dirige de forma preferente hacia personas del mismo sexo, se habla de homosexualidad. Si nuestra atracción se dirige de forma preferente hacia personas de distinto sexo, hablamos de heterosexualidad. Y si nuestra atracción se dirige indistintamente hacia ambos sexos, se habla de bisexualidad. Aún en nuestra sociedad se sigue manteniendo actitudes negativas hacia la homosexualidad, bisexualidad etc. Lo cual hace que dichas personas a veces se enfrente a situaciones complejas y se planteen cómo comunicar al entorno lo que sienten, cómo lograr una buena readaptación familiar a la situación, etc. Desde el ámbito sexológico apoyamos que las personas se vivan, tal y como se sientan y asi podamos ayudarles a gestionarse de la mejor forma posible.